Hoy se celebra el 50° aniversario del fallo de la Corte que creó la acción de amparo, formidable mecanismo para la defensa de los derechos individuales.
Aquella histórica sentencia será recordada en Mercedes, a las 10, con la presencia de la vicepresidenta de la Corte, Elena Highton; el gobernador bonaerense, Daniel Scioli; el presidente de la Asociación Argentina de Derecho Constitucional, Alberto Dalla Vía, y el Colegio de Abogados local.Aquella histórica sentencia será recordada en Mercedes, a las 10, con la presencia de la vicepresidenta de la Corte, Elena Highton; el gobernador bonaerense, Daniel Scioli; el presidente de la Asociación Argentina de Derecho Constitucional, Alberto Dalla Vía, y el Colegio de Abogados local.
"Hay fechas paradigmáticas. En 1215, los barones ingleses sancionaron la Carta Magna y se enfrentaron al rey; en 1803, la Corte norteamericana diseñó el control de constitucionalidad, limitando el poder político, y en 1957 la Corte argentina creó el amparo. Eran tiempos de enfrentamientos entre peronistas y antiperonistas y Angel Siri había sido senador peronista, al que le clausuraron su diario, Ciudad de Mercedes . La Corte, en un gobierno de facto, decidió proteger la libertad de prensa", dice Dalla Vía.
El Congreso celebra el acontecimiento olvidándolo: el Senado dejó transcurrir el año sin tratar un proyecto de ley, que tiene aprobación de Diputados, y de cuya sanción depende que la Argentina tenga una reglamentación moderna y más ágil del amparo para el ciudadano común.
Un hecho tan relevante como el amparo tiene que ver con la construcción permanente de la democracia y los derechos individuales. El hombre común debería recordar que, gracias a la acción de amparo, recuperó sus depósitos atrapados en el corralito. Y, a diario, ese mecanismo es útil para reclamarle al Estado alimentos o medicamentos o para frenar las prepotencias de algunas empresas.
A comienzos de 1956, el gobierno de facto había ordenado el cierre del diario Ciudad de Mercedes . Su propietario, Siri, presentó un hábeas corpus para pedir su reapertura, pero todos los tribunales rechazaron la demanda con el argumento de que el hábeas corpus sólo sirve como antídoto contra detenciones ilegales. El 27 de diciembre de 1956, la Corte falló en su favor.
Al año siguiente, la Corte dictó otro fallo en esa línea, que se afirmó con el tiempo. En 1966, el gobierno de facto de Juan Carlos Onganía dictó un decreto ley sobre amparo, para regular y, por esa vía, restringir el funcionamiento de esta garantía.
Con la reforma de 1994, el amparo integra el texto de la Carta Magna y, esta vez, con mucha más amplitud. Transcurrieron 13 años sin que el Congreso haya dictado una ley reglamentaria moderna y favorable al amparo.
En mayo de 2006, Diputados aprobó por unanimidad un proyecto que había sido elaborado por el diputado Jorge Vanossi (Pro-Capital), Rosario Romero (FV-Entre Ríos) y Marcela Rodríguez (ARI). La iniciativa fue remitida al Senado, pero la Cámara alta nunca la trató. Quizá sea hora de subsanarlo. via la Nacion aventura@lanacion.com.ar
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