Es una alegría que esperó 24 años. Esos en los que Argentina estuvo ausente de las finales de las Copas del Mundo. Y ahora que la Selección devolvió esa felicidad que estaba escondida en un rincón, los argentinos se volcaron masivamente a las calles para celebrar el acceso a la quinta final de la historia.
Los escenarios de los festejos son los habituales. Aunque el Obelisco de Buenos Aires vuelve a ser la sede de la alegría más masiva, en Rosario, Salta y distintas capitales del país, los argentinos se vuelvan por miles a festejar unidos esta clasificación histórica.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario