Hermanos y vecinos. La relación comercial entre la Argentina y Brasil no es nueva ni poco conocida, pero una serie de marcas y productos que ya están instalados en la segunda economía del mundo toman impulso por el contexto económico de ambos países. Y, con este escenario, también se abren nuevas oportunidades.
Una nota del periódico O Globo destacó el fenómeno con el nombre "invasión hermana", porque las medidas del gobierno generaron más presencia de productos argentinos en Brasil. Nelson Raymundi Filho, gerente comercial de Grupo Pão de Açúcar, aseguró que a fines de diciembre de 2015 compró nuevamente carne argentina, sobre todo los cortes picaña y bize de chorizo, que son populares en el país vecino. "Hicimos visitas a los frigoríficos argentinos y se reanudaron las relaciones", especificó.
José Augusto de Castro, de la Asociación de Comercio Exterior de Brasil, proyectó un aumento de las importaciones en los chocolates, los aceites y la malta de cerveza, entre otros productos argentinos que se podrán encontrar en las góndolas de Brasil. Y de acuerdo al periódico brasileño, la marca Arcor prepara 40 nuevos lanzamientos en 2016, con el chocolate Tortuguita y los caramelos Butter Toffes a la cabeza.
"En el sector alimentos y retail, hay ciertas condiciones que pueden explicar el fenómeno", dijoDante Sica, director de la consultora abeceb. En diálogo con Infobae, el economista especificó que se eliminaron las retenciones, y se produjo una caída del mercado argentino en cantidades por aumentos de precios. Pero no son los únicos factores, y el tipo de cambio juega fuerte.
"La devaluación real en la Argentina supera a la de Brasil, mientras que hay una demanda brasileña más sofisticada con una instalación de productos de mayor precio", agregó. "El fenómeno no es general", pues las exportaciones a Brasil cayeron 38% en enero y 24% en febrero, aunque el sector automotriz explica el sector automotriz.
Dulce de leche de exportación
Más allá de los productos que se puedan encontrar en las góndolas de los supermercados, la marca Havanna prepara un "plan agresivo" en Brasil: hoy posee 50 locales en el país y proyecta abrir 350 locales en cinco años. "Fuimos creciendo lentamente, con prueba y error, desde la primera vez que llegamos a Brasil hace una década", dijo Alan Aurich, gerente general de la marca.
Como la lógica impositiva de Brasil es compleja, Aurich aseguró a Infobae que la clave fue contar con un socio para manejar el negocio a través de franquicias. Abrir un local de la marca en el país vecino demanda una inversión promedio de USD 80.000, y las tiendas está ante todo en los shoppings, porque es el sinónimo de salida para los brasileños.
"Todo se produce en la Argentina y se manda a Brasil, salvo los pan dulce y huevos de pascua", especificó el gerente general de la marca, que vende ocho millones de alfajores por año en el país. Y agregó: "Nuestra idea es ser dueños del concepto de dulce de leche en Brasil, por eso impulsamos más el producto".
La heladería Freddo abrió el primer local hace seis años en el shoping Iguatemí, en Brasilia. "El mercado recibió muy bien la marca y ya contamos con 37 puntos de venta en 13 estados", aseguró Gabriela Fracchia, gerente de Franquicias y Nuevos Negocios de la compañía.
En diálogo con Infobae, anticipó la apertura de 10 nuevos locales en 2016, siempre con el foco en el paladar local. "En Brasil, desarrollamos los sabores brigadeiro y pistacho porque tienen mucha demanda. De todos modos, el dulce de leche es un éxito en todos los países en que estamos presentes", enfatizó.
Como en el caso de Havanna, la expansión en el exterior también se hace a través de franquicias, y el mínimo para operar en Brasil se ubica entre 300.000 y 400.000 reales, unos USD 83.000 a USD 112.000 al tipo de cambio actual. Todos los productos se realizan en la planta de la Argentina y se exportan a Brasil, y se venden únicamente en los locales de la marca.
via infobae
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