El presidente Mauricio Macri y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, firmaron esta mañana el convenio para el traspaso de unos 19 mil efectivos de la Policía Federal a la órbita de la Ciudad de Buenos Aires, en un acto celebrado en la Casa Rosada.
“Cada vez que recorríamos un barrio, la gente nos decía 'necesitamos más seguridad'; por eso acudimos en esa instancia en crear la Policía Metropolitana”, señaló Macri, que durante su gestión en la Ciudad reclamó insistentemente a Cristina Kirchner que le transfiera la fuerza, siempre sin lograr una respuesta positiva. “La Ciudad tiene que volver a ser una de las ciudades más seguras del mundo”, pidió el presidente.
Macri prometió volver a tener estadísticas sobre el delito “no como en la década pasada”, por lo que le reclamó a Larreta y Patricia Bullrich que trabajen para "volver a tener estadísticas públicas claras, que permitan tener un mapa del delito delito, para que mes a mes no tengamos que estar confiando en sensaciones o palabras, sino en estadísticas confiables, para que ciudadanía verifique si vamos mejorando".
Larreta dijo que el traspaso es "un primer paso muy importante" que la Ciudad maneja su propia policía para "ir mejorando un poquito cada día la seguridad", que admitió que es "la principal preocupación" de los porteños. El jefe de Gobierno recalcó que "es un camino que va a ser largo" y que "no hay soluciones mágicas", aunque insistió que "este primer paso es fundamental".
Más tarde, en conferencia de prensa, Larreta detalló que el convenio prevé el traspaso de "unos 19 mil efectivos" de la Policía Federal a la órbita local y que el objetivo es formar "una sola fuerza" junto a la Policía Metropolitana. El concepto fue ratificado por el ministro de Justicia y Seguridad porteño, Martín Ocampo, quien puntualizó que a partir de hoy se pone en marcha un "proceso de unificación para tener una sola fuerza en la ciudad".
Macri con Bullrich y Eugenio Burzaco
El jefe de gobierno aseguró también que el costo económico del traspaso es neutro. “El traspaso de la Policía Federal a la ciudad de Buenos Aires es presupuestariamente neutro. El traspaso es con recursos. Nadie gana ni nadie pierde un peso. Lo que gasta hoy la Policía Federal pasa a la ciudad”, apuntó.
Al respecto, Ocampo también detalló que existen diferentes sistemas salariales en la Federal y la Metropolitana, pero aseguró que “se trabajará en la homogenización salarial”, siempre teniendo en cuenta “la jerarquización de la fuerza” y el hecho de que “ningún efectivo va a perder los derechos que hoy tiene”. Por eso, explicó que en un primer momento habrá "una transición" entre las fuerzas, aunque van a tener "un comando político único".
En la misma conferencia, la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, buscó asegurar que la medida no afectará el desempeño de la fuerza federal en el resto del país. "Se transfiere una parte importantísima de miembros de la Federal a la Ciudad, y toda la otra Policía Federal va a trabajar en todo el país", indicó la funcionaria. "Esto para el país será muy positivo. El país gana y la ciudad gana", afirmó.
"Con el traspaso de la Federal a la Ciudad, estamos dándole un mensaje a todo el país. La Policía Federal va a estar mucho más presente en cada una de las provincias a través de agencias federales que se encarguen de la lucha contra el delito complejo", dijo Bullrich, que prometió una fuerza especializada en el combate al narcotráfico y el crimen organizado.
Volvió a hablar de complicidad K
En el tramo más político de su discurso, Macri volvió a referirse a la lucha contra el narcotráfico y apuntó nuevamente a la gestión de Cristina Kirchner por una "década de inacción y complicidad" con ese delito. “Poe suerte estamos acá y vamos a dar la batalla”, prometió.
"Es de público conocimiento lo que está pasando en la provincia de Buenos Aires, pero el narcotráfico es un problema que afecta a todos los argentinos", remarcó Macri en medio del escándalo por la fuga de los tres condenados por el triple crimen de General Rodríguez. "Todos queremos derrotar el narcotráfico, es el gran desafío", afirmó.
Más tarde, la ministra Bullrich también se refirió al tema y aseguró que el combate al narcotráfico "esta vez va en serio" y que "no miran para otro lado", en una alusión a la crítica que el Presidente había hecho antes y también ayer, en un acto en el que estuvo junto a María Eugenia Vidal.
"En la medida en que todos los actores del sistema, sean judiciales, sean policiales, sean de Defensa o de la comunidad, cuando perciban que esta lucha va en serio, día a día vamos a estar mejor", expresó la funcionaria. "Lo que tiene que saber la gente es que esta vez va en serio, que no miramos para el otro lado, que no dejamos pasar la droga como Pancho por su casa, que no somos cómplices, que vamos a fondo", y enfatizó la necesidad de realizar tocar "un lugar sensible" de los narcotraficantes, que es "el dinero que manejan".
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