Confirmado el bochorno de Ezeiza: Los controles de la gripe porcina son inexistentesDurante el fin de semana,
Urgente24 recibió reiteradas denuncias que los controles de la pandemia de influenza eran inexistentes o casi nulos en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza. Pero eran afirmaciones 'off the record' y no se publicaron porque podían interpretarse como otro intento de desestabilización de la ministro Graciela Ocaña. Sin embargo, ahora hay testigos con nombre y apellido acerca del bochorno de la prevención sanitaria pública.
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). Hay un concepto básico en la gripe porcina, protagonista de la pandemia de influenza que desde México cruzó las fronteras globales: puede contagiarse desde antes que la persona tenga los síntomas del mal.
Por lo tanto, preguntarle a una persona si en las horas recientes tuvo fiebre es ocioso. Lo más provechoso sería practicarle un hisopado y conocer dónde estará en las próximas horas para contactarla apenas se tenga el resultado del hisopado.
Sin embargo, las autoridades sanitarias desplegadas por el Ministerio de Salud en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza no tomaron esas precauciones, al menos entre el sábado 25/04 y el lunes 27/04.
Es lógico que esto ocurra: Graciela Ocaña no es una sanitarista, más allá de su disputa con el impresentable Hugo Moyano, siempre dispuesto a arrebatarse cualquier atisbo de liquidez que tenga el Estado argentino (¿hasta cuándo se vivirá la dictadura de esos sindicalistas exprimidores de los ciudadanos?).
Y tampoco sirve que Ocaña se declare perseguida política de la CGT ni abandonada por los Kirchner. Todos son contertulios del mismo aquelarre: el kirchnerismo. El dengue fue prueba de ello. Lo ocurrido en Ezeiza, cuando otros países, aún de Latinoamérica, ya habían tomado medidas concretas para prevenir el contagio, simplemente lo corroboró.
Otro concepto básico se refiere al uso de barbijos: no se trata de cualquier dispositivo sino del que se utiliza en los hospitales por ejemplo para tratar a enfermos de hepatitis o en los quirófanos. No se trata de promocionar marcas pero en la jerga de los médicos se dice "por ejemplos los 3M".
Deberían conocerlo los integrantes de la red desplegada por Ocaña en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza (quedando el interrogante de qué ocurre si un enfermo, proveniente de México, pasó los controles en Chile y se dirigió a San Carlos de Bariloche, o pasó los controles en Brasil y se dirigió a Iguazú; los controles fronterizos argentinos son parciales y muy ineficientes en un sistema extremadamente poroso de defensa de la verdadera soberanía, que no es solamente la territorial).
Mientras quienes se comunicaban con Urgente24 para denunciar las irregularidades en los controles pedían mantener su anonimato, no podía difundirse la noticia porque era muy grave. Pero ahora hay testigos, con nombre y apellido.
En los 2 aviones que llegaron desde México por la mañana del lunes 27/04, arribaron varios médicos que había asistido a un seminario en el país norteamericano (porque en la Argentina existe el absurdo geográfico de considerar Norteamérica a USA e ignorar que Canadá y México también son América del Norte).
Los médicos sabían muy bien qué hacer y lo interesante es que algunos de ellos decidieron autoimponerse una cuarentena y otros no: la ética profesional es muy dispar entre los médicos, ya lo saben los pacientes.
Un medico rosarino aseguró que pasó la oficina de Migraciones de Ezeiza sin ningún tipo de control, pese a que el Ministerio de Salud nacional instó a reforzar los operativos de control en los aeropuertos internacionales del país.
Se trató nada menos que del jefe del servicio de clínica médica del hospital Eva Perón de Granadero Baigorria, Jorge Galindez, un conocedor de temas de microbiología, quien ante esta irregularidad en la terminal porteña se aisló dentro de su hogar como medida de prevención.
Aunque asegura estar muy bien de salud, Galindez dice que es necesario que las autoridades sanitarias nacionales tomen las medidas necesarias. “No quiero generar pánico, pero tenemos la oportunidad de tomar todas las medidas de seguridad necesarias para que no llegue la enfermedad”, explicó el médico en contacto con Radio 2, de Rosario; y Cadena 3, de Córdoba.
Galíndez viajó a México junto a otro médico rosarino, Sergio Lupo, invitado por la Asociación Mexicana de Microbiología.
“Tuvimos contacto con miles de mexicanos en un aeropuerto con las características de las del Distrito Federal sin protección porque al llegar no había nada. Después tomamos las medidas de precaución, nos pusimos los barbijos”, contó el médico.
Al regresar a la Argentina, los médicos entregaron a las autoridades de Migraciones un papel que completaron en el aeropuerto de Ciudad de México y pasaron sin más controles. “Veníamos de una zona de alta repercusión internacional y no hubo controles”, añadió.
Según el médico rosarino, fueron 2 los vuelos que llegaron con escasa diferencia horaria: uno de la empresa Mexicana y otro de Aeroméxico.
Galíndez teme que con la falta de controles en los aeropuertos el virus se difunda fácilmente entre los argentinos.
Por prevención, el médico de la ciudad tomó todas las medidas de precaución posible. Se aisló en su propia casa, casi no tiene contacto con la familia, pidió a sus hijos que se fueran del hogar y permaneció en soledad en el piso de arriba.
“No voy a tomar contacto con los pacientes”, aseguró y exigió que en Argentina “se tomen medidas con más seriedad”, ya que “todavía estamos a tiempo”.
Hay un concepto clave que va al debate de fondo en la Argentina, que lleva varias décadas: el (ladri) progresismo afirma que el subdesarrollo es el resultado de la postergación económica a que somete el imperialismo. Urgente24 cree, sin embargo, que el subdesarrollo es un estado sociocultural voluntario, producto de la irresponsabilidad y la ignorancia de quienes administran el Estado.
Acontecimientos como el que se acaba de ilustrar permiten comprender de qué estamos hablando.
