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18 de mayo de 2007

Ya lleva 15 días parado el Casino flotante y reclaman que Kirchner intervenga


Desde hace 15 días que el complejo flotante de juegos de azar ubicado en la Costanera Sur porteña se encuentra cerrado, ante el evidente jolgorio de los centros de apuestas competidores (Hipódromo de Palermo, bingos de Avellaneda y Lanús, Casino de Tigre y hasta los bingos porteños).
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). Por algún motivo hoy desconocido pero que muy probablemente incluyó una suerte de 'advertencia' policial-judicial al accionista principal, Casino Club (una empresa tan vinculada a Néstor Kirchner como Conarpesa o Electroingeniería o Austral Construcciones o Gotti), asaltó el 50% de Casino de Buenos Aires, hasta ese momento 100% de la española Cirsa.
En el forzado acuerdo cedido por los españoles (no menos forzado que las presiones que existen sobre Repsol YPF para que obsequie una porción de YPF a 'amigos' de Kirchner o a Petrobras para que venda sus acciones en Transener a Electroingeniería y no al fondo Eaton Park, que elevó la mejor propuesta), la relación con los sindicatos quedaba en manos de Casino Club.
Desde entonces, paradójicamente, arrancó el conflicto presente, que ha beneficiado la recaudación del complejo de máquinas de azar en Palermo, propiedad de Casino Club, y aún de los bingos porteños, que se afirma que, contradocumento mediante, ya tienen adentro de Casino Club.
¿Quién es el principal accionista visible de Casino Club? Cristóbal López, un hombre gris a quien las versiones que llegan desde Comodoro Rivadavia, Chubut, su ciudad de residencia, fue testaferro del sindicalista Diego Ibáñez en negocios con la ex YPF Sociedad del Estado, antes de vincularse a Néstor Kirchner, hombre al que sugestivamente también se le atribuyen testaferros diversos.
Si bien Cristóbal López es Néstor Kirchner, el conflicto sindical ha crecido; y lo más curioso es que esto sucede aún cuando el sindicalista más voraz Omar Suárez, de los marítimos (SOMU), vinculado a Hugo Moyano, secretario general de la CGT y de la confianza de Kirchner.
Es decir que a Casino Club, de resultarle necesario, no le faltarían intelocutores en el conflicto, vía Kirchner-Moyano o bien vía la autoridad regulatoria, el Ministerio de Trabajo de la Nación.
Sin embargo, Cristóbal López ha decidido no intervenir en el conflicto. Peor aún: hay hasta desinterés de parte de Casino Club a la fecha, y obviamente un abandono de parte de los españoles porque en su acuerdo del 50% cedían esa área.
Bastaba con apreciar en la noche del jueves el tumulto automotor en las adyacencias del Hipódromo de Palermo para sospechar que algo no está funcionando bien en el casino flotante.
Y han comenzado otras movilizaciones sindicales porque existen otros sindicatos vinculados al complejo. El SOMU, en definitiva, es de ingreso reciente por un gravísimo error estratégico de los españoles de no acordar con Aleara, el sindicato que, más allá de las diferencias, planteaba una preocupación permanente por la continuidad de la fuente de trabajo.

En este contexto, en la redacción de Urgente24 se han recibido decenas de mails en las últimas horas vinculadas al conflicto. Uno de ellos, enviado por la agencia Anred.org/ explica una situación casi obvia: "(...) los trabajadores temen perder sus fuentes de trabajo. Quedaron en medio de una puja que impulsan un dirigente sindical y un empresario, ambos cercanos al presidente Néstor Kirchner, quienes pretenden quedarse con las arcas del Casino Flotante. Pero como no están dispuestos a perder los logros que obtuvieron mediante la lucha, y a pesar del cerco informativo que los rodea, los empleados salen todos los días a la calle para hacerse oir. El viernes 18, a las 11:30 realizarán una marcha a Casa de Gobierno para entregar un petitorio a Néstor Kirchner".

2 comentarios:

Anónimo dijo...

gracias por difundir lo que pasa con el casino flotante. muy bueno tu blog

Anónimo dijo...

Gracias por la informacion y sigamos luchando por nuestros derechos. todo el casino junto de todos los sectores.